El sistema tributario general de Italia ha recibido muchas modificaciones en los últimos años, de la mano del gobierno del Primer Ministro Salvini.
Hace pocos meses se incorporó un beneficio fiscal que busca captar a grandes deportistas, especialmente futbolistas, para que se incorporen al Fisco italiano con sustanciales ventajas en los montos finales de impuestos. A partir de la reforma fiscal, si un futbolista o entrenador llega a Italia y se compromete a quedarse al menos dos años, pagará impuestos solo sobre el 50% de su renta. Los deportistas solo pueden adherirse a este sistema impositivo reducido si hacen una devolución del 0.5% de su renta imponible al Estado. Con el fondo que se cree a partir de estos reintegros, el Estado lo destinará a los clubes y federaciones deportivas para potenciar la formación deportiva. Estos beneficios comenzarán a regir desde enero de 2020.
La contratación de Cristiano Ronaldo estuvo amparada por un régimen anterior del año 2017, también con ventajas fiscales, que permitía pagar un impuesto fijo anual de 100.000 euros para rentas generadas fuera de sus fronteras (incluyendo inmuebles y contratos de patrocinio), destinado a los contribuyentes que llegan a Italia y no han vivido allí en al menos nueve de los últimos diez años.
Ya han habido regímenes tributarios especiales para fomentar los contratos de servicios en deportistas profesionales, como la conocida Ley Beckham de España. No obstante, el Fisco español ha seguido en los últimos años una persecución contra los futbolistas de grandes contratos, como Mascherano, Neymar, Messi, Cristiano Ronaldo, etc.
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